Ortodoncia Myobrace en Molina de Segura
Myobrace es un tratamiento de ortodoncia infantil muy innovador, ya que su finalidad va mucho más allá de colocar los dientes en la posición correcta. Se trata de un tratamiento preventivo preortodoncia, enfocado en abordar las causas subyacentes de los dientes mal alineados. Por ello, los aparatos que emplea son diferentes a los utilizados con la ortodoncia tradicional, porque corrigen las verdaderas causas de una mala mordida.
En nuestra clínica dental en Molina de Segura, principalmente recomendamos la ortodoncia Myobrace, en niños con edades comprendidas entre los 3 y 15 años.
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La ortodoncia Myobrace es un sistema preortodoncia miofuncional, es decir, un conjunto de técnicas que tienen el objetivo de corregir el desequilibrio muscular orofacial, aquel que se refiere a la boca y la cara. Se enfoca, por tanto, en las causas y no en tratar las consecuencias. Así, se generan nuevos patrones musculares en la deglución, en la articulación al hablar y se reducen malos hábitos, mejorando además la estética del paciente. Se trata de expandir la forma del arco bucodental al mismo tiempo que se ejercen ligeras fuerzas para alinear los dientes y los maxilares.
En muchos casos, hablamos de paladares estrechos donde no caben los dientes y se apiñan. Solo o en combinación con otras técnicas de ortodoncia, conseguimos resultados más estables en el tiempo.
Este sistema aborda principalmente tratamientos preventivos para establecer un crecimiento y desarrollo correcto y natural. Por lo que es más eficaz para pacientes de entre tres y quince años. Otra ventaja de esta técnica es que, si se realiza correctamente, nos evitará aplicar otros sistemas de ortodoncia en el futuro.
Myobrace utiliza una serie de accesorios removibles que se aplican durante unas horas cada día y durante la noche.
Los elementos de esta ortodoncia preventiva ayudarán al paciente a respirar correctamente por la nariz, a colocar de manera adecuada la lengua, a tragar bien y a mantener juntos los labios. Así conseguimos además que se ensanchen de manera natural los maxilares y se establezca el espacio suficiente para los dientes, permitiendo que entren de forma recta y buen desarrollo cráneo-facial.
Aunque se trata de una técnica que se puede y se tiene aplicar a edad temprana, se debe esperar a que los dientes permanentes estén ya presentes.
